
Melanie Reising
"No te enloquesá, Lalita" - Actividad
La sorpresa del partido comenzaba con el primer gol del equipo del Pascual, este había logrado anotar el primer punto, lo cual hizo enfurecer a Lalita, provocando que sus furias sobresalieran de si y la envidia lograra apoderarse de él, gracias a esto puso su pie provocando una zancadilla al Pascual. Él, enojado, comenzó con una serie de insultos hacia Lalita.
-¡La concha de tu hermana, hijo de puta!- Dijo el Pascual sumamente furioso, mientras los
jugadores de su equipo lo retenían-La puta madre que te recontra mil parió.
-¡Pará, Pará!-dijo Lalita, frenándolo-¿¡A quien le decís la concha de tu madre!? ¿¡A quién!?
¿¡A quién le decís!?
-¡A vos, pelotudo! ¡A vos!- gritaba furioso mientras sus compañeros lo alejaban de Lalita.
Los gritos e insultos seguían mientras que uno de sus compañeros les decía:
-¡Dejalos que se maten!- y restándole importancia.
Los participantes de cada equipo retenían a su jugador problema, alejándolos de su
contrincante. Los suplentes los miraban y susurraban entre ellos.
-¡Puto!-gritaba Lalita-¡No, si me vas a enseñar vos!-decía con sarcasmo.
-Pero aguanten un cachiiiito-intentaban tranquilizarlos.
-¡Pero no me jodas, pelotudo!
-¡Vení, vení!-Lalita gritaba con furia y rabia, mientras sus compañeros seguían reteniéndolo-¡Vení, Vení…!-se gira hacia su compañero-¡Soltame, pelotudo!
-LA concha de tu madre-dijo tranquilo el Pascual.
-¿Vez? Me sigue puteando-le decía a sus amigos, mientras miraba al Chalo-¡Te voy a
bajar los dientes!
-¡JA! ¡Y a vos, choto de mierda, pelotudo…!
-¡Vas a morir, la concha de tu madre!-grito furioso Lalita-No vengas más por acá. Si, a
vos te digo…
-¿A quién le decís, boludo? ¿¡A quién!? ¡Vení y decímelo acá!
Cuando por fin los pudieron separar, ellos se alejaron y tomaron un poco de aire, ya
que, todo el que tenían dentro lo largaron en su larga y dura pelea
-Siempre fuiste puto-comentó sereno Lalita.
-Nunca supiste jugar al futbol- dijo el Pascual
-Vos siempre fuiste puto.
-Porque seguís insitiendo en jugar al futbol, puto-dijo remarcando
la última palabra-¡Viejo choto!
-¿Sabes lo que tengo viejo yo?... ¡TU HERMANA TENGO VIEJO YO, PUTO!
-¡Ya vas a venir para acá!
-Sorete de mierda.
-Agarrala de vuelta para acá.
-Sorete de mierda.
El árbitro ya cansado se acercó a ellos.
-Fue falta, nada más, eh- se justificaba Lalita.
-Ya fue, sigamos jugando-dijo el Pascual.
-¡Ya fue nada!-se acercó a este último-usted-sacó tarjeta roja-¡Expulsado!, Y usted-se dirigió a Lalita -¡También, afuera!
-¡Ah, el me putea y me tengo que ir!-Lalita estaba furioso.
-Afuera, señor- decía el árbitro.
-Naah, naaaaah- decía uno de los suplentes- déjame de hinchar las pelotas, viejo-se dirigió a sentarse en la banca- puta, será posible…-se lamentaba
-No le da-se quejaba otro- no le da la cabeza, siempre lo mismo con estos dos infelices, aparte era obvio, loco, que se iban a trenzar-comentaba molesto-la otra vez, acá le dejó un moretón-señaló su cuello.
-Nah, pero incluso antes de empezar el partido, los muchachos lo cargaban a Pascual, que jugaba para nosotros, ¿viste?-dijo- Le decían: ¿Otra vez te vas a pelear con el
Lalita?-habló, imitando la voz de sus compañeros
-No,no,no se puede creer, loco- se quejaba su contrincante con el cual estaba hablando-estos dos pelotudos no están cagando la historia.
-Para colmo a mí me empezó a doler la gamba de nuevo-se quejaba el compañero de Pascual, Chalo.
-¿Te golpeaste?-preguntó preocupado el otro.
-Nah, es agua-dijo restándole importancia Chalo.
-¿Agua?-la curiosidad se notaba en su voz.
-Si, agua en la rodilla, ¿Nunca viste que alguien tuviera agua en la rodilla?
-See.
-Che Quique, entra vos porque yo no doy más.-anunció Chalo, sobándose su rodilla.
Quique empezó a calentar y comentó:
-Vamo equipo, eh.
El árbitro entro de nuevo a la cancha e informó, que al próximo que jode, le saca roja y lo hecha, dando por finalizado el anuncio comenzó de nuevo el partido.
Chalo y Lalita, sentados uno en cada punta del salón, se miraban amenazantes, viendo cada movimiento que hacia el otro. Más que nada Lalita, su aspecto demostraba furia hacia el Chalo.
Mientras tanto, Chalo se puso a comentar con otro jugador sobre lo que él pensaba que sería cuando llegara a la vejez. Al hablar con el deportista contrario a su equipo, se enteró de que la discusión que tuvo Lalita y Pascual no era un inconveniente del fútbol, sino que es un asunto de plata que venía desde antes. Se enteró que Pascual salió de garante en un crédito que salió Lalita y él lo traicionó.
Aunque este pensamiento fue puesto en duda cuando en el vestuario, el arquero le comentó que la pelea viene por un asunto de mujeres, que en la facultad, Lalita salía con una mujer y Pascual se la robó y se casó con ella. Lo que él no sabía era que esa mujer fue garante en un crédito a Lalita y ahí es donde entra el tema de la plata.
Pero al rato, se encuentra con un compañero del equipo de fútbol y le comenta que esto es un tema de política, que comenzó en la facultad. Justo cuando Chalo termina de hablar con su compañero, ve a Pascual y le pregunta sobre el tema, ya que él no entiende porqué hay tantos temas diferentes, entonces decide preguntarle a uno de los personajes aludidos en el tema.
Pascual le comenta que un día que jugaron juntos en el mismo equipo de fútbol, Lalita entró al área y le cobraron penal, él quiso patear el penal, pero el técnico decidió que Pascual debía patearlo y fue ahí donde comenzó toda la disputa de estos años, y comenzó a los 5 años.


